El rezago de Pokemon Go
La otra tarde me disponía a realizar y ser víctima de un viaje en ómnibus. Antes de subir recordé el precio del boleto, y pensé que afortunado era en poder hacer uso del servicio de transporte capitalino, digamos que el servicio de transporte se ha enfocado a la clase media alta, porque es la única que con suerte puede pagar el boleto a la hora de subir. La fecha, un 24 de febrero, casi las 15:00 horas, con una sensación térmica de unos 40º aproximadamente, desde el corredor del ómnibus miré hacia los costados, lo primero que pude ver fue que ni una cortina se movia, y que no habia más que un par de ventanas abiertas, por un momento pensé que el transporte tendría aire acondicionado .... por un momento lo pensé, y lo confirmé, confirmé que no tenía aire acondicionado cuando empecé a sentir la gota de sudor que empezaba a bajar por la frente, y la otra que ya habia recorrido toda la espalda y parecía llegar a su fin. Tras secarme un poco las gotas de la cara pude ver un par de asient